El Proyecto "CORREDOR VERDE ENTRE TAMARACEITE Y CIUDAD ALTA" cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiveresidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU
Acciones específicas del
Corredor de Tamaraceite a Ciudad Alta
El Proyecto de Corredor Verde de Tamaraceite a Ciudad Alta, en la ciudad y el municipio de Las Palmas de Gran Canaria (Canarias) es una sucesión ordenada de espacios de regeneración de la biodiversidad autóctona y de renaturalización del espacio urbano que desde varios barrios de la periferia se adentra en la ciudad consolidada en su cuadrante suroccidental.
Es un conjunto de actuaciones con vocación de experiencia piloto que ejemplifique la recuperación de la biodiversidad como elemento identificador del espacio urbano y periurbano, buscando acompañarla de generar unas condiciones compatibles con la reintroducción de las comunidades autóctonas de la fauna y de oportunidades para la multiplicación de los servicios ecosistémicos a la ciudadanía. Como tal condición ejemplificadora del esfuerzo municipal, se concibe con un hito a replicar en sus resultados positivos en el resto de la ciudad. Y ello no se justifica solo en ampliar el conocimiento en la regeneración natural, sino también en las soluciones locales de adaptación y resiliencia frente al cambio climático, de la descarbonización y mejora de la calidad del aire y de tratamiento de los riesgos del espacio urbano frente a fenómenos asociados a la inundación y la escorrentía.
En el objetivo anterior, adquiere especial relevancia el acercar a la ciudadanía a la biodiversidad y los ecosistemas autóctonos, esperándose con ello efectos positivos en la mejora de la saludabilidad en el espacio público, el incentivo al ocio, el esparcimiento y las relaciones sociales en la calle, la puesta en valor del paisaje local y su relación en el bienestar de los residentes y el incentivo a los atractivos de la ciudad para la dinamización económica que derivan de la infraestructura verde.
Se define un conjunto de 7 actuaciones que se reparten entre áreas específicas de biodiversidad autóctona, espacios de renaturalización urbana y conectores ambientales o verde.
Ampliación del Lagartario del Barranco de Tamaraceite
Actuación consistente en la limpieza y la ampliación del espacio acondicionado para la reintroducción de la especie de reptil endémico de "lagarto de Gran Canaria" (Gallotia sthelini) y la renaturalización del cauce, incluyendo elementos que propicien la viabilidad natural de los individuos (plantas asociadas, bebederos, refugios frente a agresores, etc), así como de instalaciones de divulgación y sensibilización. Se persigue la generación de un ecosistema adecuado al desarrollo de esta especie significativa en la memoria natural y ecológica de Las Palmas de Gran Canaria.
Culmina una primera actuación municipal ya realizada para la limpieza y construcción de una rocalla natural a lo largo de un tramo del cauce, tras el proceso de urbanización del sector (Tamaraceite Sur).
Área de biodiversidad autóctona de La Mayordomía
Actuación consistente en la regeneración natural de otro espacio con precedente función agrícola, que tras el abandono de la misma ha quedado como superficie libre y no edificada en un entorno urbanizado entre el núcleo de Tamaraceite y el barrio de Siete Palmas, en la ciudad alta de Las Palmas de Gran Canaria. Su regeneración natural obedece a la respuesta pública auspiciada desde la Ley 42/2007, de Patrimonio Natural y Biodiversidad sobre las medidas de conservación y mejora de los hábitats de interés comunitario fuera de la Red Natura 2000 (art. 45).
En el emplazamiento se desarrollan sendos hábitats representativos de los palmerales de Phoenix (9370) y del matorral termomediterráneo y preestépico en su modalidad de tabaibal canario (5330).
La actuación es una primera fase de un proyecto global cuyo objetivo es un parque urbano ordenado en el Plan Especial de Protección de La Mayordomía. La formación natural prevista es un elemento imprescindible en la concepción del entorno del Bien de Interés Cultural, con la categoría de Conjunto Histórico, de La Mayordomía.
Área de renaturalización de Hoya Andrea
Actuación complementaria en el contexto del proyecto global de Corredor Verde cuyo objetivo es culminar las acciones precedentes desarrolladas por el Ayuntamiento de renaturalización del barrio de Hoya Andrea.
Se reordena el ajardinamiento existente y se completa la regeneración del arco de ladera y espacios libres promoviendo una mayor presencia de la biodiversidad autóctona, una mejor respuesta frente a situaciones de escorrentía y cambio climático y una mayor comodidad de disfrute público del área.
Área de renaturalización de Los Tarahales
Actuación que engloba dos piezas de espacios libres de titularidad municipal en pleno espacio de la Ciudad Alta nueva.
Se corresponde con sendos enclaves destinados a zona verde o parque que quedaron pendientes de formalizar en el desarrollo de la urbanización consolidada de Siete Palmas-Los Tarahales, al igual que un tramo longitudinal entre ambos emplazamientos que se destinará fundamentalmente a dotaciones deportivas y funciones al aire libre.
La acción aprovecharía la oportunidad de orientar este objetivo urbanístico hacia una solución con mayoritario componente natural, optimizando las condiciones de calidad ambiental del espacio urbano, la descarbonización del entorno y su resiliencia frente al cambio climático; al mismo tiempo que se recupera la presencia de la biodiversidad autóctona como ingrediente definitorio del ambiente en Las Palmas de Gran Canaria.
Área de renaturalización de Las Torres
Actuación con similar criterio a la anterior (B5) en una cota más baja y en el margen norte del Parque Papa Juan Pablo II, que engloba también dos piezas de espacios libres de titularidad municipal en pleno espacio de la Ciudad Alta nueva.
Se corresponde con sendos enclaves destinados a espacio libre que se desarrollarían en una fase posterior y previa a 2026, dado que requieren la culminación de procedimiento urbanístico de la Unidad de Actuación en que se ubican. En un entorno destinado a la transformación urbana contemporánea estas piezas forman parte del conjunto de espacios libres y zonas deportivas que se define en la estructura urbana planificada a lo largo del Barranquillo de Los Tarahales.
La acción aprovecharía la oportunidad de orientar ese objetivo urbanístico hacia una solución con mayoritario componente natural, optimizando las condiciones de calidad ambiental del espacio urbano, la descarbonización del entorno y su resiliencia frente al cambio climático; al mismo tiempo que se recupera la presencia de la biodiversidad autóctona como ingrediente definitorio del ambiente en Las Palmas de Gran Canaria.
Área de biodiversidad autóctona del Barranco de La Ballena
Se corresponde con la pieza final del Corredor verde definido en esta propuesta, mediante la que se define la conexión de eje de renaturalización con otra pieza estructurante en la configuración medioambiental de la ciudad: el Parque urbano del Barranco de La Ballena.
Conforma un centro imprescindible en la cohesión orográfica y territorial de Las Palmas de Gran Canaria, con un destacado volumen de usuarios. Su condición de sistema general de espacio libre le otorga una oportunidad irrenunciable para la definición de un enclave neurálgico sobre la biodiversidad autóctona en este tipo de escenario, pudiendo ejemplificar el resultado de la integración del medio natural en la imagen y dinamismo urbano.
Se entiende un ejemplo significativo en la aplicación de los objetivos perseguidos en las bases asociada a la convocatoria que se concursa, aplicándose una solución basada en la naturaleza frente a otras opciones de alto componente urbanizado en el concepto del espacio libre o abierto. Pretendemos reproducir con otra solución basada en la naturaleza la reintroducción del hábitat del lagarto de Gran Canaria que ya observamos en la Acción B1.
Red de conectores verdes
La definición del Corredor Verde como sucesión longitudinal de enclaves de regeneración o reintroducción de la biodiversidad requiere de una red de recorridos que le den conexión y estructura a nivel formación espacial y urbana.
Adquiere especial relevancia en el proyecto global, configurándose generalmente mediante recorridos lineales con presencia de individuos arbóreos, arbustivos y matorral representativos de la biodiversidad autóctona, a través las que se facilita la conectividad natural y la conformación de un hito identificativo del paisaje urbano en Las Palmas de Gran Canaria.
Un criterio implícito es la integración de las restantes funciones del espacio público en que se desarrolle, prefiriéndose el acompañamiento de los recorridos de movilidad activa con los que se participe del incentivo al uso y el bienestar de la ciudadanía, al mismo tiempo que la puesta en valor y divulgación de los recursos naturales asociados a la vegetación y la fauna local.