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Las Palmas de Gran Canaria celebrará su Noche de Finados recordando sus tradiciones

El Ayuntamiento recuperará la tradición del culto a las ánimas con la dramatización del episodio de cólera que asoló la ciudad en 1851, a cargo de la Asociación Drago y Laurel

La celebración, organizada por el Consistorio junto al Instituto Canario de Tradiciones y la colaboración de Los Gofiones, tendrá lugar en la Alameda de Colón y la Plaza Santa Ana el 31 de octubre y busca rescatar las costumbres de la sociedad canaria de antaño en torno a la muerte

Desde el Instituto Canario de Tradiciones se recuerda la importancia de recurrir a vestimentas tradicionales

Las Palmas de Gran Canaria, miércoles 22 de octubre de 2025. La alcaldesa de la ciudad, Carolina Darias, junto con el concejal de Cultura, Josué Íñiguez, y el coordinador del Instituto Canario de las Tradiciones, David Naranjo, han presentado este miércoles los detalles de la Noche de Finados 2025, una propuesta que consiste en un viaje al pasado para recuperar las tradiciones canarias y que se celebrará en el entorno de Triana y Vegueta.
Con la colaboración y producción del Instituto Canario de las Tradiciones y de Los Gofiones, la plaza de Santa Ana acogerá en la noche del 31 de octubre un gran baile de finados que tendrá lugar justo después de que una recreación teatralizada traslade la Alameda de Colón al año 1851, momento en el que el cólera morbo segó la vida de casi seis mil personas en Gran Canaria, la mayoría de ellas en la capital.
“Recuperar lo nuestro es recuperar la historia de la ciudad y sus gentes. Es hacer de nuestro pasado un patrimonio vivo, tangible y visible”, destacó la alcaldesa, Carolina Darias, durante la presentación del programa. Así, un año más la ciudad celebrará una nueva Noche de Finados, “recuperando nuestras tradiciones canarias, en un día tan señalado para todos nosotros, reviviendo como nuestros antepasados, los abuelos y abuelas de nuestros abuelos y abuelas, el culto a la muerte en aquellos tiempos en las casas y en las familias de esta ciudad”, añadió la alcaldesa.
Una celebración que viajará hasta la epidemia de cólera morbo de 1851, una realidad que nos queda más cercana al recordar cómo “hace pocos años, un virus desconocido, la COVID, paralizó el mundo”, señaló Carolina Darias. “Hoy, con la mirada puesta en 1851, podemos entender mejor lo que sucedió en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria”, porque, afirmó, “estoy convencida que no hay nada más potente que conocer nuestro pasado, aquello que nos ancla a nuestras raíces, para afianzar nuestro presente y proyectar nuestro futuro”. 
En esa misma línea se manifestó el concejal de Cultura, Josué Íñiguez, quien destacó que el 31 de octubre se abrirá “una ventana al pasado para revisitar un episodio histórico que marca todavía la manera en la que hoy interpretamos la ciudad”. “En ese paseo por el tiempo recordaremos la tradición de nuestra propia identidad”.
“Reconocer nuestra historia y nuestra forma de ser y de estar”, con actos como el de la Noche de Finados “reafirman la candidatura de Las Palmas de Gran Canaria a Capitalidad Cultural Europea”, afirmó Íñiguez, puesto que muestran que “tenemos una forma distinta de ver el mundo, que es la que queremos reivindicar con nuestra candidatura y poner en el centro de la Unión Europea”.
El coordinador del Instituto Canario de las Tradiciones, David Naranjo, reivindicó la necesidad de “margullar en la historia para divulgar un episodio que marcaría un antes y un después para la ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria”. La epidemia, recordó Naranjo, supuso el fallecimiento de cerca del 40 % de la población de la Isla, lo que tiene “un trasfondo no solamente emocional, sino social, económico y político”.
Un momento histórico que se revivirá en la Alameda de Colón de la mano de la Asociación Dragos y Laurel de la Villa de Moya, que con su recreación teatralizada “nos llevarán precisamente a esa noche del 31 de octubre de 1851, para ver esos diferentes aspectos tanto desde las clases más populares como de las más adineradas, pero también de figuras que hoy han desaparecido en nuestro imaginario como son los animeros”, avanzó el coordinador del Instituto Canario de las Tradiciones.
«Ánimas, la muerte sin campanas durante el cólera de 1851» es el título de esta dramatización que analizará cómo afectó la irrupción de la epidemia y los efectos que causó entre los vecinos de la Gran Canaria de 1851. Un suceso histórico cuyo contexto y consecuencias sobre la sociedad isleña del momento pudo conocerse ya en la exposición que acogió el Castillo de Mata los pasados meses de junio y julio. Abundantes documentos de la época, algunos nunca expuestos hasta ese momento, así como piezas de elevado valor histórico y artístico, arrojaron entonces luz sobre un trágico momento que marcó profundamente a los habitantes de la Isla y, especialmente, a los de su capital.
De esta forma, el Ayuntamiento, en colaboración con el Instituto Canario de las Tradiciones y Los Gofiones, pone el acento en la huella que ha dejado el pasado en la identidad colectiva y lo hace recordando una crisis sanitaria que ya marcó interesantes pautas de acción como la del aislamiento o el cierre de conexiones marítimas. Una epidemia que dejó secuelas económicas y sacudidas políticas, además de arrasar con la población de Las Palmas de Gran Canaria, principal municipio afectado. 
Cómo se vivió y cómo se despidió a los seres queridos forman parte de lo que el público verá y sentirá a partir de las 21:00 horas en la Alameda de Colón. 
Posteriormente, a las 22:00 horas, la música inundará la plaza de Santa Ana y el baile irrumpirá en la noche que, según marca la tradición, se compartían testimonios de vida y muerte, dejando clara la vocación de celebrar las costumbres propias. El aforo será libre. 
El Instituto Canario de las Tradiciones recuerda la importancia de recurrir a vestimentas tradicionales con las prendas y accesorios que ayuden a vivir una auténtica conexión con los usos y el sentir del pasado.
Más de 300 kilos de piñas y castañas asadas 
Con el fin de subrayar lo que es propio de la tradición canaria se ofrecerán 300 kilos de castañas y otros tantos de piñas asadas, dos productos íntimamente ligados a la celebración tradicional de estas fechas, provistas por la Unidad Alimentaria líder en Canarias en distribución de productos agroalimentarios MercaLasPalmas. 
Para ello, se instalarán hasta ocho puntos, cuatro de ellos en la Alameda de Colón y otros cuatro en la plaza de Santa Ana.