El Ayuntamiento recibe la Certificación de Sistema de Gestión Ambiental de AENOR por su labor responsable y sostenible en el ahorro de energía eléctrica y consumo de agua en el Servicio de Limpieza
Esta certificación otorga al servicio de Limpieza Viaria la acreditación que demuestra un comportamiento ambiental óptimo basado en la realización de buenas prácticas, en la gestión adecuada de sus residuos y en la reducción paulatina de sus consumos
Las Palmas de Gran Canaria, viernes 17 de octubre de 2014.-
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha recibido la certificación de la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), que otorga el sello de calidad del sistema ambiental en lo referente al tratamiento de residuos, lo que supone la obtención de esta distinción por tres años más debido a la gestión responsable y sostenible en el ahorro de energía eléctrica y consumo de agua.
La auditoría, que se realiza anualmente desde 2008 y que permite renovar el el Certificado cada tres años, ha determinado que dicho sistema se considera altamente eficaz y que cumple de forma escrupulosa con la normativa y legislación nacional en materia medioambiental, además de resaltar el control que se realiza en el consumo de agua tratada.
En este sentido, el Servicio de Limpieza Viaria ha sido capaz, según la auditoría realizada por AENOR, de disminuir el consumo de energía eléctrica del cuartelillo de la calle Pamochamoso en un 5,88%, del situado en Miller Bajo en un 30,56%; en el de Escaleritas un 18% y en las Oficinas Centrales del Servicio, en la calle Agaete, en un 12,67%. Asimismo, se ha rebajado el consumo de agua, un 6,43%; un 30,56%, un 18% y un 12;67% en las instalaciones de Pamochamoso, Miller Bajo, Escaleritas y en las Oficinas Centrales, respectivamente.
Este galardón otorga al servicio de Limpieza Viaria la certificación que demuestra un comportamiento ambiental óptimo basado en la realización de buenas prácticas, en la gestión adecuada de sus residuos, en la reducción paulatina de sus consumos que, en definitiva redundan en una disminución general de los costes, y de los posibles impactos ambientales.